La Reforma del Estado: 1985-2000. El batllismo en acción.
El departamento de Economía de la Facultad de Ciencias
Sociales analizaba en 1999 el proceso de la Reforma de la Seguridad Social
llevada adelante por la coalición entre el Partido Nacional y el batllismo
liderado por el Dr. Julio María Sanguinetti en estos términos: “ La reforma de
la seguridad social iniciada en Uruguay en 1995 constituye una de las reformas
estructurales de mayor envergadura que ha encarado el país en los últimos años. Fue precedida
por un largo período en que s
e sucedieron diagnósticos y propuestas de diverso
signo que, si bien no lograron en su mayoría ponerse en práctica por la falta
de acuerdos políticos, contribuyeron a que los diversos actores sociales y
políticos adquirieran creciente conciencia de los graves problemas que
enfrentaba el sistema uruguayo de seguridad social. A tres años de iniciada la
reforma, sigue habiendo desacuerdos significativos respecto a los méritos de la
solución impulsada por la coalición de gobierno, pero no parece estar en
cuestión que los cambios introducidos modifican profundamente el funcionamiento
de la seguridad social y que tendrán efectos importantes en la economía del
país” Como corresponde a la visión batllista el tema del Estado y su reforma
permanente se convierte en su ADN ideológico. Fue un largo camino que comenzó
con la seguridad y la administración de justicia como funciones básicas,
después la enseñanza pública, luego el Banco de la República comienza a
intervenir en la actividad crediticia y financiera y durante los primeros 50
años del siglo XX se generó actividades en las áreas de los servicios, la
producción y los transportes. Esto derivo en un crecimiento del funcionariado
estatal- Esto generó múltiples debates hasta alcanzar un punto alto en 1992. En
ese año se realizó un referéndum mediante el cual la ciudadanía derogó una ley
aprobada por el Parlamento que decidía profundas modificaciones en el Estado
incluyendo privatizaciones. En 1995 se aprobó la reforma del sistema
previsional que dio nacimiento a las Administradoras de Fondos de Ahorro
Previsional conocidas como AFAP.
El 29 de junio se presentó el proyecto de
reforma de la Seguridad Social en el Parlamento donde se contó con el apoyo del
Partido Nacional y la oposición del Frente Amplio y también por la oposición de
la central sindical PIT-CNT que la consideraba una propuesta contraria a la
solidaridad intergeneracional. El modelo desarrollado se basa en la creación de
un sistema de cuentas personales que podían ser administradas por administradoras públicas o privadas y a la
cual podían vincularse voluntariamente los mayores de 40 años y debía acogerse
a ellas los menores de esa edad. Se fijaba los 60 aós como edad mínima para
jubilarse y una aportación de 35 años. El sueldo básico jubilatorio se
calculaba haciendo el promedio de los últimos 10 años o los mejores 20 de la vida laboral con un tope del
equivalente al 82% del mismo. El sistema fue blanco de permanentes críticas por
la mayoría de la izquierda y por los sindicatos hasta que en las
administraciones frentistas toqueteos y modificaciones llevaron al sistema al
borde del colapso. En otro camino llevado adelante en los gobiernos
posdictadura y con el objetivo de reforma del Estado fue la permanente
reducción de funcionarios estatales. En este proceso mediante la aplicación de
incentivos al retiro anticipado de los empleados o no cubriendo las vacantes
que normalmente se producen con las jublilaciones, los retiros y los
fallecimientos. En 1984 los funcionarios públicos eran alrededor del 270 mil
personal mientras que ha fines de 1998 eran 231mil. Durante la segunda
presidencia del Dr. Sanguinetti la cantidad de funcionarios públicos se había
reducido en 9500 funcionarios lo que significó un ahorro de 80 millones de dólares, de los cuales unos 50 millones se
destinaron a pagar los incentivos de los empleados que optaron por retirarse.
Otro mecanismo de reforma del Estado fue
la modificación del sistema de compras estableciéndose el pago contado
para eliminar una práctica de sobreprecios que aumentaban los proveedores para
cubrirse ante casi 6 meses de espera para hacer efectivo los cobros. Se aprobó
un decreto que establecía las compras del Estado siguiendo tres grandes
objetivos:
1)
Integrar la gestión de las compras del Estado a
todo el proceso de reforma de la administración financiera.
2)
Crear la transparencia del sistema de compras
del Estado.
3)
Introducción de
una nueva relación entre controlador-controlado en toda la gestión publica.
Todo apuntalado por la Ley de Mejora de la Competitividad y
reordenamiento tributario que elaboró Luis Mosca que incluía un aumento del IVA
del 22% al 23%. Todas estas medidas tomaron forma en Comité Ejecutivo para la
Reforma del Estado y en 1997 se crea dentro las responsabilidades de la OPP
Oficina de Planeamiento y Presupuesto la Unidad de Coordinación General del
Programa de Reforma del Estado. El propio Dr. Sanguinetti sostuvo que el
objetivo no era eliminar el viejo Estado Batllista sino mejorar su
funcionamiento “abordando soluciones que apunten a su transformación, ya sean
éstas de desregulación, privatización o descentralización con el propósito de
optimizar la calidad de las funciones y actividades actualmente cumplidas por
la Administración” (Maiztegui. Orientales 5, Pág.375)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.