Javier Milei: Aproximación a su pensamiento económico. Una interpretación.

 

Javier Milei en su último libro comienza su análisis con la afirmación de que los economistas neoclásicos se enamoraron del modelo de equilibrio general llevado adelante por Arrow-Debrau. Aclara que tanto en su visión estática e intertemporal y también de sus propiedades con relación al bienestar.  El modelo Arrow–Debreu, también conocido como modelo Arrow–Debreu–McKenzie, es fundamental en la teoría del equilibrio general. Fue propuesto por Kenneth Arrow y Gerard Debreu en 1954 y se basa en los siguientes supuestos: Preferencias convexas: Los consumidores tienen preferencias convexas sobre los bienes. Competencia perfecta: Los mercados son competitivos, lo que significa que

no hay poder de mercado y los precios se ajustan libremente. Independencia de la demanda: La demanda de un bien no depende de los precios de otros bienes. El modelo Arrow–Debreu afirma que, bajo estos supuestos, debe existir un conjunto de precios tal que las ofertas agregadas sean iguales a las demandas agregadas para cada bien en la economía. En otras palabras, existe un equilibrio general en el que todas las transacciones se equilibran. Este modelo es ampliamente utilizado como referencia en otros modelos macroeconómicos y es crucial para probar la existencia de un equilibrio general en una economía. El modelo Arrow-Debreu es un marco teórico fundamental en la economía, pero su aplicación práctica es más indirecta. Esquematizando algunas formas en que se relaciona con la realidad económica:

1. Equilibrio general y precios: El modelo Arrow-Debreu se utiliza para demostrar la existencia de un equilibrio general en una economía. Aunque no se aplica directamente, proporciona una base para comprender cómo los precios se ajustan en un mercado competitivo.
2. Derivación de precios: A partir del modelo, se pueden derivar los precios de equilibrio para los bienes y servicios. Estos precios son hipotéticos y no se calculan directamente en la práctica, pero ayudan a comprender cómo se relacionan las ofertas y demandas agregadas.
3. Mercados de futuros y opciones: El modelo Arrow-Debreu influyó en el desarrollo de los mercados de futuros y opciones. Estos mercados permiten a los participantes cubrir riesgos y especular sobre los precios futuros de los activos.
4. Teoría de la inversión: El modelo también se relaciona con la teoría de la inversión. Ayuda a comprender cómo los inversores toman decisiones sobre la asignación de recursos a lo largo del tiempo.

La teoría de inversión se centra en cómo los inversores toman decisiones sobre la asignación de recursos a lo largo del tiempo.

Horizonte temporal: Los inversores consideran diferentes horizontes temporales para sus inversiones. Pueden elegir entre invertir en activos a corto plazo (como bonos) o a largo plazo (como acciones).

Funciones de utilidad: Los inversores tienen funciones de utilidad que representan sus preferencias. Estas funciones reflejan cómo valoran el consumo presente frente al consumo futuro.

Decisiones de inversión: Los inversores evalúan las oportunidades de inversión y seleccionan carteras óptimas. Buscan maximizar su utilidad sujeta a restricciones, como el presupuesto y las tasas de interés.

Equilibrio de mercado: El modelo Arrow-Debreu considera un equilibrio general en el que los precios de los activos se ajustan para igualar la oferta y la demanda. Los inversores eligen sus carteras en función de estos precios de equilibrio.

Diversificación: La teoría de inversión también aborda la diversificación. Los inversores buscan reducir el riesgo al diversificar sus inversiones en diferentes activos.

A continuación, el desarrollo de su pensamiento sigue la línea del pensamiento macroeconómico desarrollado en el artículo titulado “la conexión Wicksell”

En este artículo, Leijonhufvud explora la relación entre las ideas económicas de Knut Wicksell y John Maynard Keynes. Wicksell fue un economista sueco conocido por su teoría sobre la tasa de interés natural, mientras que Keynes es famoso por su obra “Teoría general del empleo, el interés y el dinero”. Leijonhufvud analiza cómo estas dos figuras influyeron mutuamente y cómo sus teorías se entrelazan en el contexto económico.

Sostiene Milei que del estudio de esta postura derivan tres escuelas del pensamiento económico: la escuela sueca, la escuela de Cambridge, donde John Maynard Keynes formula su “Tratado sobre el dinero” y la escuela austríaca. Queda claro en su relato la evolución de la escuela de Cambridge hacia la interpretación keynesiana en su obra: “Teoría general de la ocupación, el interés y el dinero” es acá donde la visión de Milei se enfrenta radicalmente con la de Keynes sosteniendo que cuando se diseña la función de consumo y la idea de propensión marginal a consumir, es un error de extrapolar la microeconomía con la macroeconomía. En este esquema se elimina la idea del ahorro como consumo futuro, pro lo tanto en lugar de definirse la tasa de interés como precio relativo de los bienes presentes en términos de bienes futuros, se define el nivel de ingreso y luego se deriva a la demanda de trabajo que, para una oferta dada determina el salario nominal. Durante la crisis de 1929 y la Gran Depresión el error de la Reserva Federal determinó el ingreso del keynesianismo lo que construyo un estado grande e intervencionista. Al llegar a este punto de su interpretación económica, dice que es imprescindible volver a las fuentes originarias o sea Adam Smith. La obra de Smith titulada “Investigación sobre la naturaleza y las causas de las riquezas de las naciones” La teoría del liberalismo económico de Adam Smith está intrínsecamente vinculada a su enfoque sobre la libertad, el mercado y la propiedad privada.

Libertad económica: Adam Smith defendía la libertad individual y la no intervención del Estado en la economía. Creía que la economía funcionaba mejor cuando no había regulaciones gubernamentales excesivas. La expresión “laissez faire, laissez passer” (dejen hacer, dejen pasar) resume su pensamiento: el mercado se autorregula mediante una “mano invisible” que equilibra las fuerzas de la oferta y la demanda.

Economía de mercado: Smith argumentaba que el intercambio libre entre las personas era esencial para el bienestar común. Creía que el egoísmo y la búsqueda del propio beneficio conducían al bienestar general. Según él, cuando las personas actúan motivadas por el egoísmo, son “conducidas por una mano invisible a promover un fin que no entraba en su propósito”, y ese fin es el bienestar común.

Propiedad privada: Smith abogaba por la propiedad privada como un derecho fundamental. Creía que la propiedad individual incentivaba la inversión, la producción y el crecimiento económico. Su obra cumbre, “La riqueza de las naciones” (1776), sentó las bases del libre comercio y la economía de mercado. Propuso reducir las barreras a la producción y el comercio para fomentar el crecimiento económico.

Es en esta obre donde ve con claridad que la riqueza es avanzar sobre el crecimiento. Aclara Milei que la obra de Smith puede considerarse como un modelo en que existen rendimientos crecientes con su ejemplo de la fábrica de alfileres que se basa del aprendizaje en la práctica y en el progreso tecnológico sumado al libre mercado donde el Estado debe mantener una muy baja participación y los individuos de se mueven según sus propios intereses en un entorno de libertad buscando el bienestar general en el equilibrio del mercado, lo que definía como “la mano invisible” que lo regula libremente. En esta aproximación podemos acercarnos muy por arriba al pensamiento del Sr. presidente de Argentina que sostiene: “Cuando la realidad no encaja en modelo económico, lo más sensato debiera ser revisar dicho sistema y tratar de detectar sus errores. Sin embargo, para los economistas neoclásicos y neokeynesianos, cuando el modelo no cuaja con el mundo real, no se lo descarta, porque la culpa pasa a ser de la realidad. Y siempre con el mismo diagnóstico: fallo de mercado”

 

Ver:

Milei, J. Capitalismo, socialismo y la trampa neoclásica. Planeta 2024, Pp 21 y Ss.

Liejonhufvud, A.  “The Wicksell Connection: Variations on a Theme” (La conexión Wicksell: Variaciones sobre un tema). noviembre de 1979.