La Revolución Gloriosa y la Declaración de Derechos de 1689
La era de Isabel I (1558-1603)
Enrique VIII asume el trono en 1509 con 18 años de edad. Desde el comienzo de su reinado estaba casado con Catalina de Aragón, viuda de su hermana e hija de los Reyes Católicos con la que tuvo 6 hijos, la mayoría de los cuales murieron a muy temprana edad, sobreviviendo solamente una hija , Isabel. Deseando tener un hijo varón y enamorado de una cortesana Ana Bolena, Enrique solicita al Papa Clemente VII la anulación de su matrimonio con Catalina. El Papa no lo autoriza, y ante la amenaza de excomunión hace promulgar por el Parlamento una serie de leyes que quitan al Papa el poder de jurisdicción sobre la iglesia de Inglaterra y atribuye al Rey y sus sucesores el poder de castigar las herejías y ser el jefe supremo de la iglesia en Inglaterra. A partir de allí se llamará Iglesia Anglicana. Al asumir Isabel I Inglaterra se encontraba dividida por el enfrentamiento religioso, con una economía inestable y en guerra contra Francia. En el Parlamento, los católicos eran mayoría en la Cámara de los Lores y en la Cámara de los Comunes la mayoría era protestante.