Luego de la muerte de Wilson Ferreira Aldunate en marzo de 1988 y del triunfo al año siguiente de Jorge Batlle sobre el Dr. Tarigo mostró con claridad para muy pocos el fin del batllismo como oferta concreta y monolítica dentro del partido Colorado. Las elecciones de 1989 mostraron, ya en aquél entonces, una postura ideológica muy similar y clara, entre Lacalle y Batlle. El resultado fue una agenda de reformas de perfil netamente liberal con la reducción del Estado como concepto principal para enfrentarse al déficit fiscal y bajar la inflación. Todo esto constituyó una etapa más del proceso de destrucción del proyecto batllista con principios como apertura de la economía, desregulación del mercado laboral, privatizaciones con grandes espacios para la iniciativa privada y que fuera el mercado y no el Estado asignados de los beneficios generados. En buen romance era la llegada a nuestro país de las reformas propuestas en el “Consenso de Washington”. Postura que el Dr. Batlle exaltaba en su