La formación del pensamiento occidental: ideas y creencias durante la Edad Media. Apuntes de clase.

El programa de segundo año de bachillerato opción social y humanista nos presenta, entre varios desafíos, tratar la formación de los estados modernos y como se conforma el pensamiento occidental. A partir de allí tratamos como brevísima aproximación algunos conceptos y líneas de trabajo, en definitiva tratamos de aproximarnos al pensamiento, estructuras y orígenes del Estado en el occidente en las siglos XIV y XV.

 En el siglo XIV y en la transición al siglo XV, una doctrina política era resultante de pensamientos elaborados por otras disciplinas. Esto muestra la gran producción intelectual, con mala prensa a veces, del período que estoy manejando. Hubo varios intentos de que sesudos análisis alcanzaran a la mayor cantidad posible de  público. Y comienza una división clara en la forma de trasmitir los conocimientos. hubo los que empezaron a escribir con ideas más simples alcanzando al gran público y a los historiadores. En general estaban formados en estudios filosóficos y finalmente trasciende el debate y se llega a ubicar al individuo frente al Estado. Por ejemplo para Guillermo de Ockham lo importante era el individuo y el bien común solo eran sumas de bienes particulares. Fue el fundador de la escuela nominalista, fraile franciscano que estudió en la Universidad de Oxford. Fue acusado de hereje por Juan XXII en la corte de Avignon. Fue un crítico del racionalismo y sostenía que todo conocimiento está basado en la lógica. O sea veía el carácter probable de las afirmaciones científicas y por consecuencia la imposibilidad de una demostración rigurosa de la ley moral e incluso la existencia de Dios. Esta concepción ponen al concilio frente al papa y los estamentos frente al príncipe, ambos enfrentamientos promueven un renacimiento en el siglo XV del nominalismo. Por otro lado en el universo de las ideas y construcción del conocimiento tenemos a los teólogos, más ocultos en sus escritorios, pero sus obras complicadas para el público general solo se consumían a nivel universitario. Desde allí empiezan a reclamar su ligar en el mundo, en el gobierno de los Estados. Con una concepción de que los gobernantes debería conformar su actuación a la ley de Dios, los teólogos reclaman para ellos el ejercicio del poder. Fue Santo Tomás de Aquino, representante de la escolástica medieval el que medió ante la crisis en el pensamiento cristiano generada por la postura de Averroes, filósofo árabe, que resaltaba la independencia del entendimiento entre la revelación y el entendimiento. Para Santo Tomás estas interpretaciones debían ser complementarias, o sea las sobrenaturales por revelación y las de orden natural por el entendimiento, o sea filosofía y teología son distintas y complementarias y aclara que son ambas racionales debido a que la teología deduce racionalmente partiendo de premisas reveladas. Este pensamiento toma peso en 1437 cuando entra en París Carlos VII se presentan al público las relaciones entre "la ley divina, la ley de la naturaleza y la ley humana" Si Dios estaba en todas las manifestaciones, para los teólogos entonces, ¿Cómo la teología no podía desembocar en la política? Los historiadores, por su lado, siempre tomaron en cuenta a la filosofía y a la teología para la formación del pensamiento político. Lo que demoró más en entrar en la consideración fue el derecho, Es el período del renacer del Derecho Romano en el occidente europeo con el descubrimiento a partir del siglo XI del Código de Justiniano. El estudio del derecho romano se introduce, entonces, en los tribunales de justicia de Francia meridional y va a influir a partir de allí en las obras de los jurisconsultos franceses e ingleses en el siglo XIII. Realmente y en general, todos los cargos administrativos desde el más simple al más prestigioso los desempeñaban individuos que habían transitado por las facultades de Derecho. Durante el siglo XV hubo grandes disturbios originados por el interés de los gobernantes de aplicar el derecho romano y las resistencias de los habitantes a los cambios. Por lo tanto fue el derecho el factor político más importante a finales de la Edad Media. En el siglo XIV el derecho canónico, el derecho civil, la teología y la filosofía eran al norte de los Alpes la única forma de hacer política. En Italia seguía manejándose la retórica y profundizan el estudio de las filosofía clásica dando pie al surgimiento del humanismo decidido a defender la libertad de Florencia, mostrando el relato del príncipe ideal y tratar de alcanzar con su figura la unidad italiana. Estos grandes pensamientos eran al mismo tiempo tan profundos y con tantos matices que imposibilitaban dar lugar a una sola posición política, pero a los ojos de la mayoría de las personas era función del Estado asegurar la paz y el único camino era hacer predominar la justicia. La definición de justicia que se definió en la Edad Media parte del jurisconsulto romano Ulpiano: "la justicia es la voluntad constante y continua de dar a cada uno lo suyo". Se inicia otro debate profundo sobre la ley eterna, la ley natural y la ley positiva y los límites al poder que cada una de ellas definía. 

Ver:

Guenée, B. Occidente durante los siglos XIV y XV. Labor. Barcelona. 1973.

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