El Uruguay del 900. Apuntes de clase. Tramo 6. Grado 9.o. Tradiciones y vanguardias artísticas. Expresiones en el pensamiento y el arte nacional del período.

 Tradiciones y vanguardias artísticas. Expresiones en el pensamiento y el arte nacional del período.

La denominada "Generación del 900" se refiere a escritores, pintores y artistas plásticos que realizaron su obra entre 1895 y 1925. Esta generación se caracterizaba por exaltar la sensibilidad, la rebeldía y el culto a la belleza. La principal influencia fue el "modernismo" y que se irradiaba desde Paris. era un movimiento que ponía énfasis en el entusiasmo individual hacia la libertad y la belleza. El concepto de generación se utiliza en las ciencias sociales  para el análisis de la historia Cultural, se refiere a un estilo y una forma de ser en una época determinada. Por ejemplo Horacio Quiroga es de la generación del 900, Juan Carlos Onetti pertenece a la generación del 45. Es claro que la actividad artística puede avanzar por varias generaciones. La Generación del

900 tuvo como características principales el desarrollo de grupos artísticos y literarios, ruedas de amigos, tertulias en las cuales se reunían a leer sus creaciones, a discutir de arte Etc. Los lugares de reunión era variados, locales adaptados para esos fines o la casa de algún escritos. Horacio Quiroga dirige un de estos grupos en el cual se reunían para leer poemas y desarrollar la escritura en español o en francés. El grupo termina con la muerte de Quiroga. El otro lugar destacable fue el que dirige Julio Herrera y Reissig, que en su casa de la ciudad vieja y concretamente en el altillo que recibió el nombre de la "Torre de los Panoramas". Fue más numeroso y predominaban en él todas manifestaciones artísticas entre mates, guitarreadas ruedas de naipes y con inscripciones en las paredes en forma de graffitis con frases como: "no hay manicomio para tanta locura" o "desdichados que crucen esta puerta, perded toda esperanza". Había también reuniones en bares  como El Moka, el Sarandí, el Polo Bamba o el Tupí Nambá. Según Martínez Moreno la actitud de los integrantes de la generación frente a la realidad del país  fue variada:

"Su interés por lo que ocurre en el medio es dispar. Están los que consideran por encima del ambiente y se agravian de su chatura, como Herrera y Reissig y Roberto de las Carreras; están los que se insertan en él y comparten las preocupaciones públicas e incluso, en el sentido más alto de las palabras, políticas: Rodó fue diputado colorado, Viana fue diputado blanco, Frugoni fue diputado socialista y jefe de partido, Frugoni fue  diputado socialista y jefe de partido, Vaz Ferreira fue candidato a diputado de un grupo liberal y figura dominante de la Universidad de la república como Rector y Decano; Reyles quiso fundar un grupo ruralista de acción política y militó en el Partido Colorado; Quiroga se expatrió del país en 1902 y Sánchez vivió buena parte de su vida en Buenos Aires, pero los -que siempre fueron fieles a su ideario anarquista- jamás se desinteresaron por lo que pasaba en Uruguay."

El dandy en el 900

Algunas personalidades de esta generación fueros definidos como dandys. y siguiendo con Carlos Martínez Moreno: el dandy 

"se caracteriza por el rebuscamiento en el vestir, corbatas, sombreros, chalecos de extravagante fantasía: por la apetencia de sensaciones, cuanto más raras y culpables mejor; por el aristocratismo intelectual y la soberbia; por la superioridad, por la insolencia por el desdén hacia el medio y el desplante como manera de provocarlo y escandalizarlo, despertándolo en su chatura; por la jactancia galante, por el culto del coraje, por la proclamación orgullosa del vicio real o supuesto; por la egolatría."

Conclusión: Según Pivel Devoto

"Al finalizar el siglo XIX, nuestra vida intelectual y artística sufrió una extraordinaria conmoción. Aparecen valores superiores en todos los géneros: filosofía, ensayo, novela, poesía, teatro, narración breve. Los nombres de Carlos Vaz Ferreira, José Enrique Rodó, Carlos Reyles, Julio Herrera y Reissig, Florencio Sánchez representan figuras definitivamente consagradas. No obstante, la creación intelectual y artística de este período no se hizo bajo el signo de la esperanza. El decadentismo europeo había contagiado al alma de América; y como ocurrió con todas las repercusiones ideológicas, también esta llegó con retraso. Y el espíritu francés se reponía, llamando a todas las energías vitales de la nación, retemplándose al calor de los grandes maestros extranjeros. Las postrimerías del siglo XIX y los comienzos del XX fueron para el Uruguay una época venturoso. La paz de 1897 pareció asegurar una feliz coparticipación. El primer intérprete fue José Enrique Rodó. En 1897 apareció "La vida Nueva" que incluía varios ensayos. Vaz Ferreira fue el primer filósofo y sus análisis llegaban a lo medular de los problemas"